A fines de marzo vamos a estar en la FFAI presentando nuestro trabajo:
"Taller de aguas: reflexiones en torno al diálogo de saberes."
Les dejamos el resumen:
Nos constituimos como Taller de Aguas en el año 2006, en respuesta a una demanda de
conocimiento científico vinculado a la problemática del agua por parte de organizaciones
sociales. Conformamos un grupo de trabajo interdisciplinario y horizontal con estudiantes,
docentes, graduadxs y trabajadorxs de la ciencia, mayoritariamente de la FCEyN-UBA, en el
marco de la extensión universitaria. Durante estos trece años de trabajo llevamos a cabo
proyectos en conjunto con distintos tipos de organizaciones sociales en barrios de la RMBA
(Región Metropolitana de Buenos Aires) como asambleas vecinales, movimientos sociales de
base y organizaciones políticas con trabajo territorial, entre otras. Nuestro trabajo incluyó el
abordaje de problemáticas ligeramente diferentes. En una primera etapa, los trabajos se
enfocaron en la problemática del acceso al agua potable, mediante la evaluación de la calidad
del agua de consumo. Bajo un esquema de trabajo similar, en donde nuestra organización
diseñaba y ejecutaba el monitoreo, y la organización social aportaba en la logística y se
abocaba a la difusión en territorio, abordamos tres barrios del conurbano (El Porvenir, La
Matanza; Mariano Moreno, Almirante Brown; Las Tunas, Tigre). En una segunda etapa nos
abocamos al estudio de la contaminación de un arroyo urbano y su posible restauración con
vistas a una mejora socio-ambiental, involucrando como actor principal a cooperativas de
trabajo enmarcadas en el Plan Argentina Trabaja (Mariano Moreno, Almirante Brown).
Actualmente estamos trabajando en Tierra Amarilla, un sector de la villa 21-24, con un enfoque
que contempla tanto la calidad del agua de consumo como otros factores ambientales con
posibles consecuencias en la salud, como las frecuentes inundaciones.
Cada proyecto presentó características propias como consecuencia de las diferentes
coyunturas y actores involucrados, lo cual implicó diversos desafíos. En particular, la forma en
la que nos propusimos construir el vínculo con las organizaciones sociales fue ampliándose a lo
largo del tiempo, en función del acumulado de experiencias propias y de otros grupos de
extensión, aportando herramientas para el establecimiento del diálogo de saberes entre el
campo popular y el académico. En la búsqueda de una ciencia comprometida con las
problemáticas y necesidades populares entendemos que los espacios de participación y toma
de decisiones de manera conjunta son indispensables, y su construcción constituye uno de los
principales desafíos con los que nos enfrentamos en la actualidad.
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